¿Por qué fracasa la jornada continua en los colegios de Zaragoza?
La jornada continua avanza progresivamente en Aragón, tras cuatro años de votaciones en los centros, pero se resiste en la ciudad de Zaragoza. Este curso hay 233 colegios aragoneses con jornada continua (dos tercios del total), pero en la capital son menos de un tercio (45). Y el próximo curso se sumarán unos 25 en todo Aragón pero apenas se incrementarán en la ciudad de Zaragoza.
Según los resultados provisionales de las votaciones de las familias celebradas la semana pasada, seis colegios de Zaragoza han aprobado el cambio a jornada continua y 17 no han conseguido los apoyos suficientes. Los centros donde ha ganado el cambio de jornada son Cándido Domingo, Andrés Manjón, Rosales del Canal, Domingo Miral, Jean Piaget y Soledad Puértolas (Valdespartera 4, que aún no cuenta con edificio propio y están en aulas puente en el Recarte y Ornat).
En cambio, en 17 colegios el proyecto de innovación y jornada continua no ha conseguido los apoyos requeridos de las familias. Estos centros son: Valdespartera, Valdespartera 3, Hilarión Gimeno, Marie Curie, Tenerías, Vadorrey, César Augusto, Doctor Azúa, Eliseo Godoy, Cesáreo Alierta, Sáinz de Varanda, Monsalud, Parque Venecia, Miraflores, Río Sena, Joaquín Costa y Villa Cruz.
En la mayoría de estos centros, el ‘Sí’ a la jornada continua ha ganado al ‘No’, pero no han llegado al porcentaje que marca la normativa (55% de votos favorables del censo). En algunos era la segunda y hasta la tercera vez que votaban, como en el Río Sena (antes Miralbueno). En este centro el proyecto de jornada continua consiguió 447 votos a favor y 103 en contra. El ‘Sí’ consiguió el 63% de los votos pero solo el 51% del censo.
El reparto de la jornada continua en Zaragoza es muy desigual. De los 62 colegios que tendrán jornada continua el próximo curso solo 4 son concertados: San José de Calasanz, Cantín y Gamboa, Santa Ana y Buen Pastor. En esta convocatoria en todo Aragón solo se presentaba un concertado más, el Villa Cruz, donde no ha salido adelante en la votación de las familias. También hay muchas diferencias por barrios. En algunas zonas, todos los colegios públicos tienen jornada continua: Las Fuentes, Santa Isabel, Parque Goya, La Almozara, Oliver y prácticamente todo los de Delicias (con la incorporación ahora de Andrés Manjón). En la Romareda han votado los cuatro públicos y no ha salido en ninguno: César Augusto, Doctor Azúa, Eliseo Godoy y Cesáreo Alierta. En el Rabal están divididos. El Cándido Domingo se suma a los que ya tienen jornada continua: Gloria Arenillas, La Jota, La Estrella, Tío Jorge, Eugenio López y Zalfonada. Pero el cambio no ha salido adelante en el Hilarión Gimeno, Marie Curie ni Vadorrey.
«Estamos muy contentos con el apoyo recibido por nuestro proyecto de innovación y cambio de jornada. La partipación en la votación ha sido muy alta. Hemos vivido un proceso de mucho diálogo en el colegio. La coordinación entre el centro y las familias es clave para que el cambio salga adelante. Hace dos años también votamos y no se consiguió. Ahora el proyecto era más completo y hemos realizado mucha difusión», destaca Begoña Huerta, la directora del colegio Cándido Domingo. El proyecto ha sido aprobado con un 66% de votos del censo.
«En nuestro colegio hay familias a favor y en contra de la jornada continua. Es la segunda vez que se vota y los resultados han sido parecidos, no se ha llegado a la mayoría necesaria», señalan desde el colegio Valdespartera. En los colegios más grandes cuesta más aprobar el cambio. «Una de las principales preocupaciones de las familias es el comedor. Tenemos 700 alumnos y unos 480 son usuarios del comedor, en dos turnos. A muchos les preocupaba que los niños comieran tarde con la jornada continua», reconocen desde la dirección del colegio. Uno de los colegios grandes donde sí han salido la jornada continua es Rosales del Canal, con un 55,65% de votos del censo.
«Estos resultados demuestran que no había un clamor por la jornada continua. Se trata de una imposición disfrazada de innovación. Se permite que los colegios voten cada dos años hasta que salga la jornada continua. Los padres votamos ‘no’, porque estamos preocupados por nuestros hijos. Creemos que la jornada continua perjudica al rendimiento académico, porque los niños están más cansados. Por ejemplo, en el colegio Valdespartera hay casi 200 niños en madrugadores (de 8.00 a 9.00) y tenemos dos turnos de comedor. ¿Quién quiere llevar a su hijo al colegio a las 8.00 y que no coma hasta las 14.30 o más tarde?», afirma José Luis Ortega, padre del colegio Valdespartera y portavoz de la Plataforma por la jornada partida en Aragón.
«La jornada continua seguirá en aumento siguiendo la tendencia que hay en el resto de España. En la ciudad de Zaragoza, donde los censos son más altos, es más complicado que salga adelante con la actual normativa. La gente está muy descontenta con el sistema de votación. Se debería rebajar el porcentaje exigido, sobre todo teniendo en cuenta el alto nivel de satisfacción en los centros donde ya se ha implantado la jornada continua», afirma Miriam Ortega, portavoz de la Plataforma Sí a la jornada continua en las escuelas de Aragón.
La actual normativa no satisface a casi nadie. Educación ha modificado pequeños detalles cada año pero no el porcentaje de apoyos exigido. Los partidarios de la jornada continua piden que se rebaje el porcentaje al 51% del censo o el 55% del total de votos. Los defensores de la jornada partida quieren que se endurezca y se exija el 66% de apoyos.
Fuente: www.heraldo.es